En los tiempos que corren, mucha gente no alberga demasiadas esperanzas en la retribución que probablemente obtendrá cuando esté en edad de jubilarse, del mismo modo que actualmente muchas personas mayores se ven obligadas a buscar soluciones que complementen su pensión.
Tener en cuenta nuestro futuro es algo absolutamente necesario para nosotros mismos y para quienes nos rodean y, en una sociedad que cada vez goza de una mejor salud, es más importante que nunca. No en vano, España cuenta con una esperanza de vida de las más longevas del mundo. Por eso, para poder disfrutar de lo que más nos gusta y de nuestros seres queridos durante nuestra vejez, cada vez surgen nuevas y mejores estrategias que benefician tanto a propietarios como a inversores.
España es un país con una férrea tradición de propiedad que lo sitúa como una de las poblaciones con mayor porcentaje de propietarios de la Unión Europea, especialmente entre la parte más mayor de la sociedad. Muchas personas han dedicado la mayor parte de su vida a construir un legado que dejar a sus herederos, pero los tiempos y los estilos de vida cambian cada vez más rápido y las herencias físicas pueden generar problemas y son difíciles de repartir.
La Nuda Propiedad: una solución práctica
En este panorama, hace ya varias décadas, nacieron productos enfocados a ofrecer soluciones a personas mayores como la venta de la Nuda Propiedad o la Hipoteca Inversa, de las que cada vez se oye hablar más. En lugares como, por ejemplo, el Reino Unido, estas alternativas se han implementado con mayor regularidad desde hace más tiempo, mientras que en España se trata de un movimiento creciente.
La Nuda Propiedad supone un acuerdo que permite al vendedor desprenderse de uno de sus derechos como pleno propietario manteniendo el usufructo, o lo que es lo mismo, el derecho al uso y disfrute del inmueble. De este modo, puede recibir una cantidad importante de dinero, ya sea con un solo pago, dividida en varios, o incluso mediante una renta vitalicia y seguir viviendo en su hogar para toda la vida.
Además de que la persona que vende la vivienda obtiene ciertos beneficios económicos, también se desprende de ciertos pagos que le corresponden al nudo propietario. Sin embargo, esta estrategia también conlleva una serie de responsabilidades y gastos, tanto por parte del vendedor como del comprador, y hay que tener claro cuáles son.
Gastos principales del nudo propietario y el usufructuario
Como ya hemos comentado, tras firmar el acuerdo, el nuevo titular de la Nuda Propiedad tiene el derecho a “la propiedad” del inmueble. Por otro lado, el derecho al usufructo se extinguirá en el momento en que el vendedor fallezca o se acabe el plazo acordado y el comprador pasará a ser el pleno propietario. Estos son los gastos y las ventajas más importantes que tendrá que asumir el vendedor, que pasará a ser usufructuario, y el comprador, que será el nudo propietario de la vivienda tras la fecha de la firma:
Gastos de formalización de la operación
- Los gastos generados en la compraventa (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, notario y registro) serán abonados en su totalidad por el comprador
- El Impuesto de Plusvalía Municipal será abonado por el vendedor.
Gastos de mantenimiento
Una vez formalizada la operación ante notario, los gastos de la vivienda se distribuirán de la siguiente manera:
- El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), las derramas extraordinarias y el seguro de continente serán asumidos por la parte compradora.
- La cuota ordinaria de la comunidad, el seguro de contenido, la tasa de residuos urbanos y los suministros (luz, agua, etc.), individualizados o no, serán asumidos por la parte vendedora.
Ventajas de la Venta de Nuda Propiedad
El vendedor se desprende de varios cargos. Al margen del Impuesto Municipal de Plusvalía, el usufructuario no tendrá que hacerse cargo de ningún otro tipo de impuesto, ni de los honorarios de Notaría, del Registro de la Propiedad y de la Gestoría. Además, si el inmueble del que se desprende es su vivienda habitual, también contará con una exención completa de la declaración de la Renta (IRPF) teniendo en cuenta su posible ganancia patrimonial. Otra ventaja muy recurrente para los vendedores es que tienen la posibilidad de alquilar la vivienda o vender su derecho de usufructo al inversor.
En Hausstar entendemos que cada caso es diferente y nosotros tratamos de enfocar todas las situaciones desde un punto de vista personal para aplicar la mejor solución posible. Por eso, recomendamos el trato con profesionales como nosotros que pongan por delante a sus clientes y busquen el beneficio común.