El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) es inherente a todos los propietarios, pero no todos ellos están al corriente de la posibilidad de pagarlo a plazos que, como siempre, depende de cada ayuntamiento ya que este tributo se gestiona localmente. Actualmente, en pleno periodo de escalada de precios e inflación, existen muchos contribuyentes que optan por esta forma de pago del IBI ya que no siempre es fácil llegar a fin de mes tranquila y desahogadamente.
Como acabamos de señalar, la gestión de este tributo es independiente, por lo que es posible que las condiciones y los requisitos de la fracción del pago no sean las mismas en cada localidad, aunque lo normal es que los ayuntamientos se organicen de forma similar. Sigue leyendo para averiguar qué tienes que hacer para aprovechar esta posibilidad que, sin lugar a dudas, estará al alcance de tu mano.
Qué es el IBI y cómo se fracciona
El IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles), como su propio nombre indica, es un tributo que se aplica anualmente a los propietarios, aunque cada ayuntamiento establece un calendario propio, así que tendrás que estar atento al procedimiento que se aplique en el sitio donde residas. Por lo general, este pago se ha de realizar durante la segunda mitad del año y es muy habitual que se permita dividir en plazos.
También es habitual que los organismos responsables brinden bonificaciones a los propietarios que domicilien el pago del IBI y lo abonen de forma automática, sea a plazos o no. El fraccionamiento de este tributo está ligado a las normas de cada jurisdicción, por lo que no podemos establecer unas reglas estrictas generales, aunque existen ciertas directrices que se pueden aplicar en casi cualquier caso.
Como es lógico, siempre será preferible solicitar el pago a plazos durante el periodo voluntario, antes de la fecha límite. De lo contrario, siempre te podrás topar con mayores restricciones y ya habrás comenzado a generar deuda. En caso de que estés experimentando ciertas dificultades para hacer frente a tu cuota dentro del plazo voluntario, es recomendable que pidas el fraccionamiento con antelación.
La división de la cuota dependerá también de la localidad en donde vivas, al igual que las fechas de cobro aplazado. En Madrid, por poner un ejemplo se podrás fraccionar el pago en dos, tres, cinco o nueve partes. Además, como en todo proceso administrativo, deberás entregar la documentación correspondiente entre las que, con toda seguridad, se incluirá tu domiciliación.
En cuanto a la tramitación del aplazamiento, no te encontrarás con demasiadas dificultades. Si tu ayuntamiento tiene un portal virtual donde puedas identificarte, probablemente puedas gestionar online la mayoría de los pagos de tus tributos locales, incluido el fraccionamiento del IBI.
Recuerda que, para realizar este tipo de operaciones en la web, hoy en día es preciso utilizar métodos de verificación como Cl@ve o certificado electrónico. En caso contrario, siempre podrás pedir una cita previa para realizar el trámite de forma presencial o acudir directamente a la oficina.
Por último, si ninguna de estas dos opciones te convence, siempre puedes contactar mediante vía telefónica. También es recomendable llamar, aunque sea para pedir información. Por último, cabe destacar que en este tipo de solicitud en particular no se suelen aplicar intereses, al contrario de lo que suele suceder en el caso de aplazamientos de la mayoría de impuestos.
Cómo pagar el IBI a plazos desde Madrid
La capital de española es la ciudad con mayor número de habitantes, esto no quiere decir que su ayuntamiento vaya a realizar una mejor gestión que el de otros municipios, pero me parece un buen ejemplo para entender el procedimiento. En este caso, se puede solicitar el pago del IBI a plazos mediante los planes de pago del Ayuntamiento y existen tres vías principales para fraccionar este tributo:
- El PAC (Pago a la carta), del que habíamos hablado anteriormente, permite la división
del IBI en 2, 3, 5 o 9 plazos y además otorga una bonificación de 5 % del importe.
- En segundo lugar está el SEP (Sistema especial de pago), que fracciona en dos plazos el pago de la cuota con una bonificación del 3,25 %.
- Por último, también se puede realizar el pago directo.
Para realizar los dos primeros trámites puedes optar por la plataforma online del ayuntamiento. Por supuesto, podrás acudir de forma presencial, tengas cita previa o no en las oficinas de asistencia del Ayuntamiento de Madrid o por vía telefónica.
Ejemplo de fracción del IBI en Barcelona
Otra de las ciudades más importantes del país es Barcelona, por lo que también ejemplificaremos el proceso en este caso. En la Ciudad Condal también cabe la posibilidad de dividir en plazos el pago del IBI de forma gratuita, algo ciertamente extraño en lo que a fraccionamientos de deuda se refiere. No obstante, existen algunas restricciones que es importante conocer:
- No se pueden dividir cuantías inferiores a 100 €.
- Si el propietario percibe ingresos mensuales superiores a 5.000 € o posee un gran patrimonio, no podrá fraccionar el tributo.
- Las cuotas están limitadas a un importe mínimo de 50 €.
Tal y como habíamos avanzado, las posibilidades de tramitación de este proceso son las más habituales. También podrás acceder a la plataforma del ayuntamiento de forma online, acudir a la oficina presencialmente o llamar por teléfono.
Para despedirnos, desde Hausstar esperamos que te hayan quedado claro los pasos habituales para fraccionar el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles. No te olvides de apuntarte las fechas de cobro para evitar cualquier tipo de sorpresa desagradable. También te instamos a ponerte en contacto con nosotros si te ha quedado cualquier tipo de ayuda e intentaremos ayudarte de la mejor forma posible.